
Vista general del Castiel.lu L.lamardal, (Imagen: Eduardo Pérez-Fernández © 2010)
Localización
Trescastro, parroquia de Gúa, Somiedu
Catalogación
Fue catalogado por primera vez por José Manuel González y Valles el 4 de julio de 1971. Incluido en la Carta Arqueológica del concejo de Somiedu realizada en 1996 por Rogelio Estrada García también es citado por Margarita Fernández Mier en su trabajo sobre el origen del doblamiento medieval del concejo, (1999, 164). Por último, Alfonso Fanjul lo incluye en 2004 dentro de su catalogo de castros asturianos.
Régimen de Protección Legal
Incluido en el Inventario del Patrimonio Cultural de Asturias (IPCA) del 23 de diciembre del 2013 y en Catálogo Urbanístico de Somiedu.
Descripción
Se localiza en un espolón cuarcítico en el extremo noroccidental del monte de la Corona’l Castro, en la cabecera del valle de Somiedo. Destaca en primer lugar la gran altitud sobre la que se emplaza, unos 1303 metros y su valor estratégico por su cercanía al camino que asciende hasta el Puertu. El promontorio presenta abruptas laderas en las vertientes oriental y occidental del promontorio frente a las meridional y septentrional más suaves.
1996
El recinto tiene una dimensiones de unos 85 x 50 metros y muestra un marcado buzamiento hacia el NW. Las obras defensivas se concentran en el flanco meridional del espolón, donde éste se une a través de un istmo al monte. Consisten en un conjunto de tres fosos excavados en la cuarcita que cortan el acceso por este sector. Dos de ellos, los más externos, discurren por la vertiente occidental del itsmo mientras que el restante, prácticamente lo atraviesa entero. Es el de mayor tamaño, unos 34 metros de longitud, 5 m de ancho y 5-6 metros de profundidad en su segmento oriental (Estrada, 1996).

Paramentos de la muralla en el sector meridional del Castiel.lu L.lamardal (Imagen: Eduardo Pérez-Fernández © 2010)
Está rellenado parcialmente por una gran cantidad de derrumbes provenientes de la ruina de una muralla de la que áun se aprecian sus cimientos y que coronaba el foso por su escarpe interno. Dicha estructura muraria debió bordear la mayor parte del perímetro del recinto, sino todo, según se deduce de los pequeños tramos de muro que afloran en el borde de los cantiles. Aprovechando estos derrumbes en tiempos más recientes se levantó sobre sus restos el muro de cierre de la parcela (Estrada, 1996).

Derrumbes de la muralla en el frente septentrional de Castiel.lu L.lamardal (Imagen: Eduardo Pérez-Fernández © 2010)
Está rellenado parcialmente por una gran cantidad de derrumbes provenientes de la ruina de una muralla de la que áun se aprecian sus cimientos y que coronaba el foso por su escarpe interno. Dicha estructura muraria debió bordear la mayor parte del perímetro del recinto, sino todo, según se deduce de los pequeños tramos de muro que afloran en el borde de los cantiles. Aprovechando estos derrumbes en tiempos más recientes se levantó sobre sus restos el muro de cierre de la parcela (Estrada, 1996).
En el extremo suroriental del recinto, en su sector más alto, se conserva otro gran amontonamiento pétreo que delata la ruina de un hipotético bastión que complementaba y reforzaba la muralla en el sector más vulnerable del asentamiento.
En vertiente septentrional del recinto, donde es menor la inclinación de la ladera, se observan nuevamente sus restos en forma de derrumbe en abanico. Estaba construida con un paramento externo labrado en sillarejo, un relleno interior y un paramento interno integrado mayoritariamente por bloques de pequeñas dimensiones (Estrada, 1996).
Periodización
Indeterminado
Según testimonio recogido por Estrada de la propietaria de los terrenos, durante la realización de unos trabajos de tendido eléctrico, se extrajeron objetos metálicos en un estado de conservación muy deficiente, que acabaron siendo desechados por los autores del hallazgo (Estrada, 1996).
Estado de Conservación
Fue afectado en las áreas septentrional y meridional del lateral W por la instalación de dos torres de tendido eléctrico, que fueron sustituidas al poco tiempo por las actuales, situadas fuera del recinto murado. Esto supuso la apertura de una pista de acceso por la esquina noroccidental del recinto y la excavación de grandes hoyos para la cimentación de hormigón. Las mencionadas torres aún permanecen en el lugar, tumbadas, tras haber sido serradas en su base (Estrada, 1996).
Leyendas y Tradiciones
Se desconocen.
Bibliografía
ESTRADA GARCÍA, R. (1996): Carta Arqueológica del concejo de Somiedo. Consejería de Cultura del Principado de Asturias. No publicada.
FANJUL PERAZA, A.(2004) Los Castros de Asturias, una revisión territorial y funcional. Ayuntamiento de Teberga.
FANJUL PERAZA, A.(2014) Los Astures y el Poblamiento Castreño en Asturias. Tesis Doctoral. Universidad Autónoma de Madrid.
FERNÁNDEZ MIER, M. (1999): Génesis del territorio en la Edad Media. Arqueología del Paisaje y evolución histórica en la montaña asturiana: el valle del río Pigüeña. Serv. de Publicaciones de la Universidad de Oviedo.
GONZÁLEZ Y FERNÁNDEZ-VALLES, J. M. (1976), Miscelánea Histórica Asturiana. Oviedo.